Siempre me ha llamado la atención la cocina y me quedo ensimismada viendo cómo cocinan en la tele,la forma de cortar la verdura, cómo en 22 minutos hacen un menú de chuparte los dedos o cómo te hacen una tarta que quita las penas sólo con el olor.
La cocina es algo que engancha bien para hace, para comer o para las dos cosas. Pocas personas son indiferentes a este mundo de los cinco sentidos.
Tanto engancha que somos capaces de viajar a un lugar u otro en función de su gastronomía amén de las personas que viajan exclusivamente por ir a uno u otro restaurante.
La semana pasada todavía nos alegraban dando el premio a un restaurante español, como el mejor restaurante del mundo en el World´s 50 Best Restaurant que no es poco en este mundo tan competitivo, y que con toda seguridad no sólo hace que las reservas en el Celler de Can Roca se disparen si no que hacen que España siga siendo un destino gastronómico por excelencia detrás de la vecina Italia.
Y los datos cantan: la gastronomía española atrajo a 5,6 millones de turistas internacionales en 2012, que no es poco y dentro de los datos arrojados en el informe de Turespaña, Asturias alcanza un 8,8 de nota adelantada por La Rioja.
Está claro que es uno de los pilares de nuestro turismo regional junto con la naturaleza pues por todos es sabido lo bien que se come en Asturias. Ahora nos lo dice un estudio, que no está de más, aunque pensemos que es confirmar lo obvio
Lo que es una realidad es que la Asturias gastronómica no para, con grandes, medianas o pequeñas acciones: unas estrellas michelín, jornadas gastronómicas por todo el territorio, concursos de pinchos y tapas, nuestra cocina tradicional, nueva cocina, restaurantes de renombre, nuevos valores.... todo suma para el 8,8 ese casi casi sobresaliente.
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